Octubre de 2006 "No hay un corazón que valga la pena, ni uno solo que no venga herido de guerras, sigo aquí, cuanto silencio hay, cuanto silencio, no sé... no quiero pasados cargados de impuestos ni busco imposibles en cielos abiertos, pero algo que valga la paz por la que hay que apostar...amor inmenso y sin medida, sin historia y a medida, amor que no haga más preguntas preparado a no entender; amor que mire bien de frente, suficientemente fuerte, amor que no busque salida y no me cueste la vida...", Bosé.
Hace un tiempo mi hermano, el que se vincula cotidianamente con los celuloides me dijo que siempre tenía una musiquilla sonando en su vida, algo así como un soundtrack del mejor protagonista de la película de tu vida. Esa vez, creo que me quedé callada, de pudor básicamente, porque en realidad, siempre he vivido con una música para la ocasión.
Y ayer, conversando con una querida amiga de la escuela universitaria, empezamos a mirar para atrás y me fui acordando de todas las canciones que me acompañaron mentalmente en estos temas del amor de a dos. Y justo de noche, entre medio de mis frecuentes insomnios, me puse a mirar el cable, y alcancé a escuchar dos de esos temas de mi propia película:
1990, Un tema que me encanta hasta el día de hoy, pero ya no suena en mi cabeza, la interpretaba Pedro Aznar con Path Methany y era un enredo entenderla, pero me encantaba igual " como un lento mar se cayó en la espuma. Te pedí, que no dieras la vuelta....."
1993, la escuchaba mentalmente mientras cruzaba el puente Pío nono. El tema era de un gringo que nunca cantó nada mejorcito, y se llamaba "in my mind", sonó todo ese verano, mientras yo hacía la práctica en la revista Apsi y pololeaba con un sujeto de derecha, absolutamente olvidable.
1995 Illapu, Sin cero positivo, octubre de ese año, profundamente enganchada de un periodista ecuatoriano. Inigualable él, y la canción, un tema que de romántico nada, pero me hacía feliz.
1997 no era el tema del año ni mucho menos, pero sonaba en la Casa Ñuñoa, una especie de guarida que adopté, donde compartí con el padre de mi hija, su único atributo. El tema era "Te conozco" de Silvio Rodríguez. Una canción que nunca he vuelto a escuchar.
2001, ese año frecuentaba almorzar con una sola persona. protagonistas de una película francesa me decía él. pero la canción de mi momento era otra de Bosé, que ahora he olvidado completamente, pero siento que era linda.
2004. año full solitario, donde la música que sonaba subiendo al metro, cruzando una calle o llegando a mi casa era de la película Amely. me inspiró muchísimo, no pretendía ser amely, de alguna manera ya lo había sido a fines de mi época escolar y hubiera sido pátetico repertirlo.
2005. Una canción que solía cantar su propio autor. decía entre otras cosas " artistas al poder" y algo así como que "sin quererlo se habia enamorado". literatura. buena literatura.
si tienen temas, soy toda oídos.
La autoría de la foto inicial es de javito feliz, más conocido como mi entrañable amigo Javier Barría, camarógrafo y fotógrafo.
1 comentario:
gran tema! ojalá otros y otras puedan seguir compartiendo canciones....
escriban!
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