El arte de la imagen fotográfica va más allá de la belleza, va más allá de la forma, puesto que si puede, toma la fuerza de la voz y habla, denuncia, llora y despierta.
Ayer vi un documental maravilloso, que tras haber obtenido una serie de premiaciones en festivales, se dio a conocer masivamente a fines del 2007: "La ciudad de los fotógrafos".
Sebastián, su autor, con un nivel de sensibilidad admirable, no erró ni en el nombre de este trabajo, ni en cada uno de los pasos que fue dando para construirnos esta historia que es suya y de todos los chilenos.
Su padre, José Moreno, a quien entrevisté hace más de diez años, es un fotógrafo que fue parte de un movimiento que nació en dictadura y que reunió a una serie de fotógrafos de medios escritos que se hicieron llamar: asociación de fotógrafos independientes, AFI, con el propósito de identificarse y protegerse en medio de la dictadura. ¿Protegerse de qué? de la detención, el golpe y hasta de la desaparición al momento de registrar cada una de las macabras escenas que nos daba la dictadura a chorreo.
Así, en esa Asociación que salían a la calle achoclonados, participaron los fotógrafos cuyos trabajos podíamos ver en revistas como Apsi, Análisis, Hoy, Cauce, etc. y nombres como los hermanos Hope, Claudio Pérez, Inés Paulino, Paz Errázuriz, Kena Lorencini, Luis y Oscar Navarro, entre otros, con su adrenalida y apuesta personal dieron forma a una fundamental lucha silenciosa.
Uno de los testimonios que se ve en el documental nos confirma "en un momento me di cuenta que mi cámara era un arma, y un arma que tenía poder". Así es, así fue.
El mérito de este trabajo tan hermosa e inteligentemente desarrollado no sólo se agradece porque nos ayuda a ver la dictadura desde otro foco, sino también porque nos ayuda a recordar que en nuestro país hubo un momento de la historia en que muchos, muchos chilenos y chilenas hicieron lo propio teniendo el corazón puesto en una sola cosa: la libertad y la recuperación de un pueblo. Y eso no se puede olvidar.
Hay escenas conmovedoras como cuando Luis Navarro relata su detención de cinco días y la amenaza que le hicieron los de la CNI de manchar su trayectoria y hacer creer a sus pares que era un soplón de la dictadura. Ese relato junto con la imagen de una fotografía tomada a su padre eriza los pelos. Sebastián le pregunta qué significa esa foto y Navarro contesta que fue el momento cuando le contó a su padre lo que había vivido durante esos cinco días...
Personalmente, tuve emociones paralelas a lo propio que me contaba el documental, pues sin duda tras conocer y entender lo que hizo el grupo de la AFI , no queda más que admirar. Pero ocurre que a muchos de esos fotógrafos los conocía por entrevistas, conversaciones e incluso porque me los he topado con frecuencia en la calle. Lo jodido es que en esos momentos no tenía idea realmente quién era el que pasaba a mi lado.
FICHA TÉCNICA
Dirección: Sebastián Moreno
Producción: Viviana Erpel
Guión: Claudia Barril, Nona Fernández, Sebastián Moreno
Fotografía: David Bravo, Sebastián Moreno
Montaje: Teresa Viera-Gallo
Música: Silvio Paredes, Manuel García
Duración: 80 minutos
País: Chile
Año Realización: 2006